Cómo tener una familia cristiana ideal.

EE.UU.- (ORBITA) Por Dr. Ramón Murray.- La Biblia provee reglas y enseñanzas efectivas para la buena relación de los padres con sus hijos. Este tipo de relaciones puede ser una convivencia saludable y feliz o, en caso negativo, puede convertirse en una vida insoportable. El consejo bíblico para disfrutar de una relación agradable se da en muchos pasajes de las Escrituras.

Uno de los más referidos por maestros predicadores es el siguiente: "Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra. Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor" (Efesios 6:1-4).

La palabra "padres", usada por el apóstol Pablo, tanto en su carta a los Efesios como la de los Colosenses, viene de la palabra griega "pateros", la cual se usa para refiriese a "padre y madre". Esto indica que la responsabilidad de luchar por que las relaciones padres-hijos sean buenas y saludables recae sobre ambos progenitores.

A. LA OBEDIENCIA La obediencia es una actitud de sumisión, la cual nos mueve a hacer lo que se nos manda, pero que se da con mayor facilidad cuando se cultiva una atmósfera de amor y consideración. La obediencia a los padres es algo que agrada al Señor, como lo expresó el apóstol en Colosenses 3:20 y Efesios 6:1-3. Obedecer a los padres, cuando éstos están viviendo en la voluntad de Dios, resulta en bendición para los hijos (Deuteronomio 5:16; Éxodo 20:12).

B. LA DESOBEDIENCIA Los hijos desobedientes son considerados en la Biblia como personas "necias", de un proceder negativo y renuente. Esta actitud se empieza a ver en la adolescencia y continúa hasta la edad en que pretenden independizarse y manejar su vida a su manera. De acuerdo con Proverbios 10:1, "el hijo necio es tristeza de su madre".

Es fácil comprender la tristeza de una madre cuyos hijos le son desobedientes. Ella se siente defraudada y desafiada por quienes debieran agradarla en todo. En Proverbios 19:13 se toma el lado del padre: "Dolor es para su padre el hijo necio". La desobediencia de los hijos le causa tristeza a la madre y dolor al padre. Ella reacciona con quejas, gemidos y lágrimas; en tanto que él puede expresar su dolor con enojo y violencia. Esto es lo que está causando tantas tragedias en los hogares de hoy.

DEL LIBRO "MANUAL PRACTICO PARA LA FAMILIA" © DR. RAMON MURRAY