EL MOTIVO DE MI EXISTENCIA.

Tres días después de la horrible tragedia del terremoto que asolo al Perú a unos trescientos kilómetros de Lima por la costa del Pacifico, estaba en un vuelo de a.C. rumbo a la cuidad de Atlanta, para más tarde llegar a la ciudad de Norcross Georgia, mientras leía una revista de esas que tienen en los aviones, para matar el aburrimiento del vuelo, note que una joven que estaba sentada a mi lado me miraba, deje la revista a un lado y le pregunte joven se siente usted bien?, no me contesto, me dijo estoy muy nerviosa vengo de Perú me toco vivir el terremoto en Lima a unos 6.5 en la escala Richter. Más sabemos que 300 Km de Lima tembló a unos 8.0 en la escala de Richter.

¿La joven me pregunto a que se dedica? Le dije, “soy Pastor, consejero familiar y conferencista de fe motivacional.” Me dijo, “siento que Dios me está llamando hacer algo, esta es la segunda vez que Dios me libra de la muerte, pero no se para que nací, ni para que vivo.” Le pregunte que si quería que orara por ella, me dijo que si, ore por ella se sintió más tranquila y le explique que con todo ser humano Dios tiene propósito. Le dije, “ahora después de mi regreso me voy a Perú con un grupo de misioneros a servir allá,” me dijo, “todavía la tierra tiembla.” Le contesté, “es una muy buena razón para encontrar el propósito de Dios ayudando a nuestros hermanos necesitados.”

El problema mayor del ser Humano siempre ha sido saber el motivo de su existencia, Séneca Lucio Aneo en siglo 4 antes de a.C., se hacia las mismas preguntas (1) ¿de dónde viene el hombre?, (2) ¿a dónde vive el hombre? (3) ¿para que esta aquí el hombre? (4) ¿para dónde se irá el hombre?". Realmente (1) el hombre viene de Dios (2) nacemos en un país, o nos mudamos a otro, (3) estamos aquí con un gran propósito de Dios para el mundo, ese propósito se alcanza sabiendo que quiero, definiendo realmente lo que es importante para alcázar el propósito de mi vida; el exitoso y el fracasado de diferencian en que el primero le dedica todo su tiempo a las cosas importantes y el segundo le dedica más tiempo a las cosas triviales sin importancia, donde no saca provecho alguno.

(4) el hombre volverá al polvo de donde fue sacado y formado su cuerpo, mas su espíritu volverá a Dios que se lo dio, así que debemos aprovechar bien el tiempo porque los días son malos, mas saber y estar haciendo el propósito por el cual dios nos trajo aquí es el mejor aliciente del ser humano, saber que hacer lo que nos gusta hacernos emociona cada día de la vida a seguir adelante; y aun mas saber que es nuestro propósito por el cual existimos en esta vida.


© Dr. Ramón Murray

Dr. Ramón Murray, Ph. D. Th. D. Ed. D.

Teólogo, Filosofo, Educador.